FÉLIX CORTÉS CAMARILLO
Comencemos con latinajos. Herrar es humano. Cometer errores también lo es: lo de herrar es ponerle zapatos a las yeguas.
Errarum humanum est sed perseverare diabolicum. Muchas veces he escuchado la sabía máxima que no requiere traducción, y se atribuye a Séneca, que llevada a la condición humana nos obliga a aceptar que no siempre estamos en lo correcto. Y, sobre todo, si insistimos en nuestra pendejez, es peor. También se atribuye a Cicerón una versión similar: Cuisvis hominis est errare, nublius nisi insipientes in errore perseverare. Me cae que debí haber sido cura de los tiempos en que las misas se decían en latín y dando la espalda al respetable. Se me daban las lenguas; vivas.
A mí no me molesta reconocer cuando me equivoco, que suele suceder. En este sitio, había yo adelantado mi moderado contento por el hecho de que el primer acto de gobierno de la señora PresidenteE Sheinbaum iba a ser la visita a los damnificados de Acapulco por el tremebundo ciclón John, que sigue chingando por la zona.
A cambio, la señora presidentE decidió inaugurar el refrito de las conferencias mañaneras de Lopitos; mismo lougar, mismos invitados selectos y filtrados, mismo derecho de adimisión y límite (dos al mes) de preguntas por “reportero admitido”. Mismo esquema de propaganda abiertamente confesa del que quiere establecer la agenda de todos los medios.
La mano confesa de Andrés Manuel al través del productor de las mañaneras de Lopitos, Jesús Ramìrez Cuevas, hoy flamante coordinador de todos los asesoras de la señora presidentE, es innegable. De ahí la inclusión, todos los miércoles, de la sección inédita aún, “el detector de mentiras”, instrumento del gobierno para desmentir cuanta verdad se publique y no coincida con la vesión oficial, y de paso darle palo al pensamiento indipendiente. Hasta la semana pasada se llamaba “¿Quién es quién en las mentiras” . El aparato de la descalificación y la mentira.
Pero eso es el vehículo; lo importane es la esencia. El primer acto real de la PresidentE Cladia fue pedir un formal perdón en nombre del Estado mexicano a todas las víctimas de la matazón y abusos del 2 de octubre, hace 56 años. Doña Claudia aprovechó para argumentar que pedir perdón enaltece al agresor, como en el caso de Tlatelolco y que por eso insistía en que el reino de España se dignificara a sí mismo pidiéndole perdón a ella.
El conflicto inventado por doña Beatríz Gutiérrez Müller para que nos devuelvan el polvoso supuesto penacho de Moctezuma y nos pidan perdón, se desfonda en el tema de España. Todos sabemos que en el proceso de la Conquista hubo salvajes matanzas por parte de los conquistadores y por los conquistados. Cinco siglos después, cuando ya existen España y México como países dignos y maduros, entrelazados por su estirpe, cultura, idioma e historia, ¿quién debe pedir perdón a quién? Tal vez la señora PresidentE tiene un argumento.
Yo le regalo uno, aunque por un buen rato ella tendrá a su alrededor obsequiosos autores de salidas ingeniosas: Yo o hablo de venganzas ni perdones: el olvido es la única venganza y el único perdón. Es de un tal Borges, argentino, por cierto. No sé si haya oído hablar de él.
PARA LA MAÑANERA (porque no me dejan entrar sin tapabocas, porque es igual que la anterior, pero con más reservas de admisión): Es impresionante el escudo magnético que los Estados Unidos dieron a Israel. De las imágenes que conocemos, los cientos de cohetes enviados por Irán o Jizbolá desde Líbano, se la pelan: ni uno solo cae en tierra de Israel. Mientras tanto, los soldados de la estrella azul de David avanzan por territorio del sur de de lo que una vez fue la vieja Fenicia, cuna del comercio.
Wednesday, October 2, 2024
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